Reseña: "El abrazo". Jornadas de Diálogo y Reflexión sobre la danza folklórica hoy
4 y 5 de Septiembre de 2017. Auditorio CePIA

Por Mónica Miguel (monicamiguel.cba@gmail.com)

El lunes 4 de Septiembre tuvo lugar en el Auditorio CePIA la apertura de "El abrazo. Jornadas de Diálogo y Reflexión sobre la danza folklórica hoy”, a cargo de las bailarinas Flor Julio y Paola Aiudi, quienes propiciaron desde el comienzo un espacio de encuentro e intercambio entre bailarines y educadores de la danza popular en Córdoba.
Con la proyección de un video realizado para este fin, las jornadas se presentaron como un lugar de diálogo donde "el abrazo" es "verse, encontrarse, empatizar" con un otro que es individual pero también colectivo.

Las Jornadas, que contaron con numerosas exposiciones, recorrieron diversos campos de reflexión no sólo desde la perspectiva de los sujetos como bailarines y artistas, sino principalmente como educadores en el terreno de las danzas populares.
Los ejes que atravesaron las ponencias fueron muchos y tuvieron un lugar clave los relatos de experiencias en proyectos pedagógicos innovadores, donde los talleristas desandan los esquemas tradicionales de la enseñanza de la danza folclórica y gestan nuevos espacios educativos, donde la consigna es la flexibilidad, tanto de las dinámicas de trabajo como de los cuerpos.
Cuerpos libres, espacios públicos, redes solidarias, tramas sociales, construcción de identidades personales y colectivas fueron algunos de los conceptos que materializaron charla tras charla, entre expositores y asistentes.

Rondando la Plaza

El proyecto de "Bailar la Plaza", de Verónica Moreira, abrió la jornada con el relato de su experiencia en el Taller de Folclore que dicta en la Plaza de la Intendencia. Desde allí, plantea que el desafío de esta propuesta es principalmente la posibilidad de romper los espacios y códigos tradicionales de la enseñanza del folclore y habitar colectivamente un espacio público, donde se invita a bailar, sanar a través de la danza, formar redes y superar las limitaciones. En épocas de crisis, el arte debe encontrar espacios nuevos y generar alternativas flexibles para que las personas hagan de la danza parte de su vida cotidiana superando cualquier condicionante.
Este espacio plural y flexible que plantea Moreira fue creciendo lentamente. "Primero vinieron dos personas, después 5, y ahora tenemos una ronda de 150 personas por encuentro", revela, mientras algunos de sus participantes de taller que la acompañaron se expresan con pasión y agradecimiento. "Bailamos con el alma" y "confiamos en la ronda" dicen quienes se animaron a habitar sus cuerpos libres y el espacios público desde esta propuesta de danza popular y colectiva.

Individualidades colectivas

Entre experiencia y experiencia fueron surgiendo certezas y nuevas preguntas ¿Por qué es tan importante y necesario construir identidades sociales desde el arte?
Marianza Orzaocoa, creadora del proyecto grupal "Paganas", responde a este interrogante haciendo pie en su historia personal. Una biografía repleta de identidades fragmentadas tuvo que reconstruirse una y otra vez: como sujeto, como mujer, como militante y como bailarina. Una identidad individual que se fue rearmando en experiencias personales y a la vez colectivas de búsqueda, donde el descubrimiento de las danzas rituales comunitarias se le presentó como alternativa artística en ese sentido. Así surgió hace trece años "Paganas", un grupo de mujeres, amigas, compañeras que se constituyeron "en contra" del lugar que plantea el sistema y la iglesia que debe ocupar la mujer. Proponen desde este espacio un rol más activo de la mujer, donde puede zapatear, usar las boleadoras o tocar el bombo, quebrando los estereotipos de rol femenino asignados al género históricamente.

Danzas tradicionales y cuerpos actuales

El campo de la danza, como el del arte en general, es territorio permanente de exploraciones y búsquedas y nunca está librado de preguntas y tensiones que lo atraviesan. Mirar, discutir y poner en palabras esas tensiones es la propuesta de la bailarina y educadora Geraldine Maurutto quien dirige diversos espacios de Danzas Populares en Córdoba. La preguntas vuelven una y otra vez hacia las definiciones de lo popular en este área. En sus espacios de taller, lo popular no reside sólo en las raíces de las danzas sino también en una apuesta pedagógica popular, que no impone la forma de los cuerpos y de las coreografías sino que parte siempre primero desde la escucha, la comprensión del sentido, la expresión, y desde allí la búsqueda de la forma. Un abordaje flexible y dinámico desde el cuerpo y la interacción con el arte, donde incluso los roles de género no son rígidos y se trabaja en un espacio circular. Este enfoque le permite a la tallerista, propiciar verdaderos encuentros con el otro desde la danza, superando los rígidos estereotipos de los cuerpos en la enseñanza de danza folclórica tradicional.

Las tensiones se siguen expresando, y Maurutto, como tantos otros, se pregunta reflexiona sobre cómo abordar las danzas tradicionales en cuerpos actuales.

El Abrazo continúa su ronda, el camino está abierto. El encuentro y el diálogo se hicieron posibles: palabras, sentires, interrogantes y experiencias encontraron un espacio para ser compartidas, miradas, reflexionadas y puestas en cuestión.