Escritura performática. Cuerpo y acción en Efimerodrama

Director/a: Soledad Sánchez Goldar
Responsable: Sebastián Huber
Integrante: Luciana Irene Sastre

Nuestra propuesta forma parte de un proyecto mayor cuyos tres ejes principales son: escritura performática, Sistemas Minimalistas Repetitivos (SMR) y arte de acción, proyecto que obtuvo la Beca de Investigación del Instituto Nacional del Teatro para el período 2017-2018. Para la convocatoria CEPIABIERTO 2017 procuramos concentrarnos en el desarrollo del eje dedicado a los SMR en relación con el arte del performance.

Este proyecto es fundamentalmente procesual en la medida en que se estructura entre etapas de trabajo consecutivas: la primera, involucra a dos colaboradores formados en el área del performance para entrenamiento, desarrollo y producción de SMR; una segunda etapa, en la que se suman colaboradores interesados en el conocimiento de la metodología pero no necesariamente formados en el área; una tercera etapa, dedicada específicamente a la producción, cuyas especificidades surgirán de las dos etapas anteriores y que apuntará a la definición –tentativa-de la noción de “efimerodrama”.

El proceso conlleva el desarrollo de un trabajo escriturario específico para este proyecto: la escritura que llamamos “performática” es comprendida dentro del trabajo de producción artística pero también como una exploración teórica. Esta zona relacional que abre la escritura implica una redefinición de las categorías habituales en los marcos disciplinares mencionados, y de allí que nos atrevamos a pensar en una categoría nueva, flexible pero consciente de sus pilares estéticos como es la de “efimerodrama”. Sintéticamente, tal denominación aspira a considerar, en todos sus niveles, el desarrollo de la dimensión temporal proveniente de los estudios y prácticas del performance al mismo tiempo que se inserta en una tradición genérica inherentemente tensionada entre el cuerpo y el texto, la obra y la puesta en escena, el autor y el director, el aquí y ahoray el ahí y entonces, etc.

El proyecto prevé, en relación a lo dicho y siempre que el proceso creativo lo requiera, un tránsito entre las etapas descriptas en el que se intercepten e interpelen roles, es decir, aquellos que tradicionalmente distinguimos como los de autor, director, actor, espectador, investigador. En este sentido, la figura de “colaborador” es fundamental para hacer avanzar el trabajo de formación individual, grupal y la producción artística simultáneamente. Ahora bien, teniendo en cuenta la organización en etapas, es importante destacar que la periodización tiene estrecha relación con momentos de apertura del trabajo realizado, ya sea por la incorporación de un colaborador especializado en algún aspecto de lo que se está produciendo o bien por la presentación a público. Así, cada una de esas aperturas funcionará como instancia de concretización y de diagnóstico, pequeña pausa en el continuum del proceso creativo del que la presente propuesta es un esquema dinámico.